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El motín del ejército romano en Sucro, un antiguo fuerte que ya no existe en España, tuvo lugar a principios del 206 a. C., durante la conquista romana de Hispania en la Segunda Guerra Púnica contra Cartago. Los amotinados tuvieron varias quejas, incluyendo no haber recibido el pago debido a ellos y estar infraprovisionados. Las causas inmediatas del motín habían existido durante años, pero no se habían abordado a satisfacción de los soldados. Las cosas llegaron a un punto crítico después de que se difundieron los rumores de que su general al mando, Scipio Africanus, se había enfermado gravemente. Pero las historias resultaron sin fundamento; logró suprimir el motín y ejecutó a sus cabecillas. Los antiguos eruditos consideraron el motín como el evento más importante de la carrera militar temprana de Africanus.

La Batalla de Sucro se libró en el 75 a. C. entre un ejército rebelde bajo el mando del rebelde romano Quinto Sertorio y un ejército romano bajo el mando del general romano Pompeyo. La batalla se libró a orillas del río Sucro, cerca de una ciudad del mismo nombre. Terminó indecisamente: con Sertorius ganando una victoria táctica pero teniendo que retirarse porque el colega de Pompeyo, Metelo, y su ejército se acercaban.